Merengues

Estos pequeños merengues que se derriten en tu boca son tanto crujientes como similares a una nube y requieren únicamente 5 ingredientes. Se pueden utilizar para una fiesta, una recepción o cualquier otra ocasión donde haya muchos amantes de las cosas dulces y deliciosas.

Ingredientes para unas 120 gotas de merengue:
6 claras de huevo grandes
½ cucharita de crema de tartar
¼ cucharita de sal
1 taza de azúcar
4 cucharadas de ralladura de cáscara limón fresca
Precalentar el horno a temperatura baja. Cubrir dos fuentes de horno con papel para hornear o papel manteca. En un bol mediano, con una batidora a velocidad alta, mezclar las claras de huevo, la crema de tartar y la sal hasta que se formen picos suaves. Con la batidora aún andando, espolvorear el azúcar por encima de la mezcla de a 2 cucharadas soperas por vez, mezclando hasta que el azúcar se disuelva y el merengue forme picos duros y brillantes cuando se levanta la batidora de la mezcla. Añadir de a poco la ralladura de limón.

Pasar el merengue con cuchara a una manga decorativa con una punta de estrella de 1 cm. de espesor. Pasar el merengue formando estrellas a la fuente de horno, con una separación de 2 cm. unas de otras, sobre las fuentes para horno preparadas. Hornear los merengues hasta que estén sólidos pero no marrones, lo que tomará 1 hora y 30 minutos, rotando las fuentes de horno entre la parte superior e inferior del horno a la mitad de la cocción. Apaga el horno y deja los merengues dentro durante 1 hora para que se sequen por completo.

Saca los merengues del horno y enciéndelo de nuevo a la misma temperatura para poder hornear los merengues restantes. Enfríalos por completo y luego quítalos del papel de horno con una espátula amplia de metal. Guárdalos en un contenedor bien cerrado a temperatura ambiente por hasta 1 mes.